lunes, 4 de mayo de 2009

La sonrisa perpetua


Un regalo inesperado,
Un buen libro,
Un buen vino...


Yo y mi bicicleta,
Él con sus golosinas,
Tú con tus patines...


Tú para mí...
Y Yo... para ti...

¡ese beso que une dos almas!


aquel niño que duerme en tus brazos...


Tu Familia,
tu unidad familiar...


¡Ayyy LA gran fuerza de la amistad!


chocolate que cubre la boca de un niño,
la inmortalidad de la ausencia del sentimiento de la responsabilidad,
la responsabilidad del no parar hasta encontrarla,
encontrar esa sonrisa perpetua dueña de todos esos momentos que se convierten en eternos al albergarse en nuestros recuerdos...
y,
que con sólo evocar a nuestra memoria, de ella se apropria aquel sentimiento...
emanando de nuestra mirada el brillo que refleja aquel eterno recuerdo
y liberando con aquella sonrisa emocionada en nuestros labios, la magia y la belleza de encontrar el sabor y el placer de la vida en nuestra vida.


Nuo siamo felice... tanto... ¡Tantissimo!